…”how many years can some people exist
Before they’re allowed to be free?
Yes, ‘n’ how many times can a man turn his head,
Pretending he just doesn’t see?
The answer, my friend, is blowin’ in the wind,
The answer is blowin’ in the wind”
Bob Dylan
Todas somos las desaparecidas de Puebla.
Por muy cruda que sea la realidad. Por más declaraciones que emitan las autoridades. Por más justificaciones que nos digan; la realidad es una: nuestras mujeres poblanas son estadística.
Las mujeres en Puebla, somos parte de la estadística más estúpida e irracional que pueda existir. No estamos siendo reconocidas por ser parte de algunos números que brillen en positivo, no somos logros. Las mujeres poblanas SOMOS ESTADÍSTICA ROJA. ¡Estamos siendo vistas y escuchadas en cadenas internacionales, nacionales, regionales y locales por ser parte de los altos índices de desaparecidas y muertas a diario.
El fenómeno social que se vive en nuestra entidad, es desgarrador: CIENTOS DE FAMILIAS LLORAN A SUS DESAPARECIDAS.
Hoy, soy una voz que se alza a través de la pluma, manifiesto enérgicamente el repudio a los acontecimientos que se viven en Puebla. Repudio la delincuencia y la inseguridad, pero repudio más la insensibilidad con la que nuestras autoridades viven.
En reiteradas ocasiones ,las poblanas y los poblanos hemos solicitado se active la alerta de género. Los poblanos y las poblanas queremos que existan protocolos para que las mujeres tengamos la garantía a una vida libre y sin violencia.
La alerta de género, se fundamenta en la sensibilidad y humildad de las autoridades por reconocer las condiciones de inseguridad que se vive en la entidad; partiendo de este hecho, se debe decretar la alerta.
Muchos de ustedes -aún-, pudieran preguntarse ¿En qué consiste, pues las autoridades no la activan? La respuesta es de lo más sencillo, una vez decretada la alerta, se deben crear acciones positivas gubernamentales de emergencia para enfrentar y erradicar la violencia feminicida en un territorio determinado. “La violencia feminicida es la forma más extrema de violencia contra las mujeres” –sic-. Sin duda es, lo que estamos padeciendo las mujeres poblanas.
Luego de los acontecimientos donde millones de mujeres mexicanas nos hemos visto reflejadas en el reciente caso de #MaraCastilla; el fondo del tema se relaciona con varias reflexiones. Sí, fue Mara la víctima, pero en ella vemos reflejada a gran parte de nuestra enferma sociedad mexicana. Si bien es cierto que, no es Mara; son cientos de mujeres mexicanas quienes hemos sido víctimas unas en mayor medida pero somos –y hablo en plural porque si dañan a una nos dañan a todas- quienes por el simple hecho de ser mujer, hemos sido violentadas.
Las desapariciones suceden a diario. Nos duelen en lo más profundo como sociedad. Como sociedad fallida a la que nos genera una enorme impotencia escuchar cómo se hilvanan las tragedias diarias. Nos duele como sociedad que estamos pendientes con varios temas por resolver.
Cualquier ser humano, que venere la vida al escuchar cada una de las trágicas historias y los terribles desenlaces, sentirá que el corazón se le estruja. A Puebla nos aqueja una realidad desgarradora: La Violencia de Género y los Feminicidios.
Según las cifras oficiales del 2014, 2015 y 2016, sumaron 191 feminicidios. Y en 2017 llevamos un conteo de 82 víctimas. ¡No puede ser posible!
Los números son fríos, pero si existe una estadística de feminicidios, es sinónimo de que estamos ¡graves! “que si son muertes aisladas, que si no encuadran en el patrón para ser feminicidios, que si el protocolo de investigación no ha concluido, que si son homicidios dolosos, que si no se llegó a investigar a fondo etc etc”. ¡Ya basta! Todas estas frases deben dejar de ser paliativos y volverse el origen de acciones gubernamentales a-fir-ma-ti-vas.
Como sociedad exigimos acciones contundentes.
Como sociedad exigimos alto a la impunidad.
Como sociedad exigimos seguridad.
Como sociedad exigimos se aplique todo el peso de la ley a estos asesinos.
Como sociedad, ¡exigimos justicia!
EXIGIMOS que se active la Alerta de Género.
Puebla y las poblanas, no merecemos autoridades que sean culpables por omisión. Puebla y los poblanos no merecemos estas tragedias que viven casi cinco familias nucleares a diario.
La solidaridad de la sociedad poblana, ha tapizado con miles de textos las redes sociales. Gritos desesperados por #Mara, pero más bien, son reflejo del miedo por vernos cada día más cerca con un caso como el de Mara Castilla.
En menos de dos días se han convocado a marchas nacionales y estatales. Los mexicanos y mexicanas somos sensibles y solidarios. Exigiremos desde las diferentes trincheras poner un alto a la violencia de género.
¿Cuántas Maras habrá en Puebla? ¿Cuántas mujeres que en condiciones económicamente marginadas han callado? ¿Cuántos casos han quedado en la impunidad? ¿Cuántas otras Maras han impulsado hashtags pensando en el peligro en que a diario se encuentran? “#NoFueTuCulpa, #VivasNosQueremos, #NiUnaMás, #MiCasaEsTuCasa, #NiUnaMenos, #SiMeMatan”.
Cómo sociedad nos queda la vía de la unión, el apoyo solidario, el amor al prójimo, todo con el único objetivo: disminuir la violencia feminicida como forma más extrema de violencia contra las mujeres.
Debemos actuar, mientras las autoridades “sigan esperando reunir los elementos suficientes para declarar procedente la alerta de violencia de género contra las mujeres en Puebla, luego de que fue notificada como improcedente el pasado 7 de julio de 2017”.
Al Tiempo.
@mayrusmayrus7
@divandelamujer
Nota:
Las entidades en las que la Secretaría de Gobernación ya decretó la Alerta de Género y que están obligadas a crear políticas públicas para disminuir cualquier delito contra las mujeres son Estado de México, Nuevo León, Chiapas, Morelos, Michoacán, Sinaloa, Veracruz, Nayarit, Quintana Roo, Guerrero, San Luis y Colima.