Puebla, Pue.- El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, renovó el lavatorio de pies y replicó en una ceremonia religiosa, la acción en la que Jesús fue humilde con sus apóstoles.
Durante su mensaje, pidió a los creyentes conservar la sencillez y servir a la comunidad como lo señalan los mandatos bíblicos.
Este año, los apóstoles fueron 12 ancianos que pertenecen al Asilo Particular de la Caridad “Santa Inés”, que está a cargo de las siervas del Sagrado Corazón de Jesús y de los Pobres.
En entrevista posterior, explicó que la mañana de este jueves, se presentó en el penal de San Miguel para lavar los pies a 12 presos y enviar la palabra de Jesucristo a través de una ceremonia religiosa.
“Sin duda es un acto se conmueven, aunque estén internos, muy lejos de sus familias y son celebraciones que se conmueven en sus comunidades. Participan de apóstoles, en la misa, en el coro, y eso quiere decir que no han olvidado su fe, pese a la situación difícil de soledad y de lejanía a sus familias”, declaró.
Durante una entrevista, el Arzobispo poblano comentó que también acudió al Cereso de San Miguel, donde del mismo modo convivió y lavó los pies a 12 reclusos.
En este caso, Sánchez Espinosa destacó que convivió con las familias de los presos, a la par, destacó que gran parte de los reos participan en las actividades que se llevan a cabo con motivo de la Semana Santa.
Subrayó que a pesar de estar detrás de las rejas, los detenidos no han olvidado su fe, incluso, destacó que en las situaciones difíciles es cuando la fe se acrecienta más.
“Es un rito hermoso de humildad por parte nuestra (los sacerdotes) y del Papa. Los internos siempre me dan cartitas, se acercan a platicarme de su situación y saludarme. También me piden que salude a sus familias cuando recorro el estado”, enfatizó.
Finalmente, el Arzobispo agregó que conoce gran parte de los Ceresos de Puebla y dijo que siempre escucha a quienes así se lo piden.
