Puebla, Pue.- El diputado federal Víctor Manuel Giorgana Jiménez urgió a las autoridades de los tres órdenes de gobierno a combatir la plaga de mosco que ha sido desdeñada por más de una década y que presenta actualmente niveles peligrosos, por ser de alto riesgo para la salud y un efecto trastornador de la vida económica, productiva y social de miles de poblanos que viven a las orillas de la laguna de Valsequillo.
Al presentar un punto de acuerdo en la sesión de la Comisión Permanente, advirtió además que la contaminación de la presa -formalmente llamada “Manuel Ávila Camacho”- ha acarreado a los habitantes “enfermedades como leucemia, déficit de atención, concentración de plomo en la sangre, males bacterianos y renales, deficiencia en el desarrollo del tubo neural y afectación de la médula ósea, con independencia de aquellas que propiamente los mosquitos pueden transmitir”.
Giorgana enumeró –en el documento que fue publicado en la Gaceta Parlamentaria– las localidades del municipio de Puebla que son principalmente afectadas: San Baltazar Tetela, los Ángeles Tetela, San Andrés Azumiatla, San Francisco Totimehuacán, San José del Rincón, Santa María Guadalupe Tecola y San Pedro Zacachimalpa, así como San José Tejaluca, del municipio de Tzicatlacoyan.
El también coordinador de los legisladores poblanos del Partido Revolucionario Institucional (PRI) llamó al gobierno del estado e instancias federales a atender urgentemente este problema.
“La plaga de mosquitos, producto de la contaminación del agua de Valsequillo, es el problema más urgente que deben atender las autoridades a nivel federal y estatal.
“Los habitantes de los pueblos y comunidades que habitan alrededor están obligados a soportar no sólo el fétido olor, sino la plaga que está afectando la vida económica y social de la población… lo que repercute en su calidad de vida.
“Se presenta también dificultad de emprender proyectos turísticos; se entorpecen actividades como la navegación y la pesca y, como consecuencia, la muerte de peces (carpas y tilapias) por las condiciones del agua del embalse, así como de ganado vacuno que se alimentaba de las malezas acuáticas contaminadas”, describió.
Víctor Manuel Giorgana estableció que la presa coloquialmente conocida como Valsequillo, el cuerpo de agua más grande de Puebla, comprende el área del lago del mismo nombre, en el que confluyen los ríos Atoyac -el río Balsas en el estado- y Alseseca.
La contaminación de estos afluentes, dijo, ha afectado ya de manera grave, con enfermedades congénitas, a comunidades de la región.
“A lo largo de los años se han observado altos niveles de contaminación dentro de la presa. El agua no es potable y consumirla presenta altos grados de riesgo para la salud.
“En la población conocida como José Tejaluca, contigua a la presa, se detectan niños que presentan deficiencias congénitas en manos, pies, así como labio leporino y paladar hendido, todo esto a consecuencia de la contaminación del agua dentro de la presa”.
