Tras criticar que varios de sus “amigos morenovallistas” se pasaran a Morena, el panista Javier Lozano Alarcón lamentó que Pepe Chedraui se haya convertido en el candidato a la presidencia municipal por el movimiento y aseguró que “le está costando tragarse ese sabor”.
En conferencia de prensa, donde estuvieron los delegados nacionales del PRI y PAN, para pedir que el gobierno del estado saque las manos del proceso electoral, Lozano dejó en claro que no se enfrentará a Chedraui, será el abanderado del PAN, Mario Riestra, aunque dijo que, sin duda, también habrá tiro.
“Sobre Pepe Chedraui, yo me considero su amigo, no sé si después de hoy de que este hablando francamente, esté interesado. No me imagino un Pepe en Morena. Ahora resulta que me vuelvo de la cuarta y me creo en las mentiras y las trampas de este presidente. Creo que le está costando tragarse ese sabor, yo no voy a enfrentar a Pepe, va a enfrentar a Mario. Es lógico que el enemigo, Morena y sus aliados, el tiro va a hacer ahí y ahí vamos a estar para echarnos ese tiro”.
Consideró incongruentes a todos los morenovallistas que se sumaron a Morena cuando es el partido que ha destruido al país: “sí estoy sacado de onda con esta situación y, sí, amigos míos están en Morena, allá ellos y su consciencia y conveniencias, sus intereses, pero no comparto esa razón de ser, no soy de los que vende su alma al diablo”.
También destacó que no cree que Mario Riestra sea tan “guey” para incluirlo en su campaña si sabe que le va a restar, por lo que respondió que llegó para darle un valor agregado a la campaña, “a que sea sabrosa”.
Igualmente, se consideró bravo, más no bravucón como lo calificó el dirigente estatal del PVEM, al tiempo de subrayar que no va a cambiar.
“Conmigo el que se sube se pasea, digo las cosas con fundamentos y con la firmeza necesaria. Si pensaron que es un concierto del festival Cervantino, están equivocados, es una contienda electoral y son de contrastes”.
Al final, los delegados del PAN y PRI, Julio Hernández y Roberto Padilla, respectivamente, denunciaron que supuestamente el Gobierno de Puebla está amagando a los ediles con no aprobarles sus cuentas públicas, además de “plata o plomo” si no se unen a Morena.