Puebla, Pue.- Luego de que un grupo de maestros afiliados al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación sección 51 (SNTE) alertaron un presunto uso indebido del “Fideicomiso” por parte del Dirigente Estatal Jaime García Roque para responder a una denuncia por alrededor de 280 millones de pesos de un programa de Vivienda; se ha desatado una cascada de “quejas y denuncias magisteriales”.
El primer conflicto sindical de acuerdo con los quejosos –quienes pidieron el anonimato ante el riesgo de represalias- se suscitó en pasados días, cuando administradores de la Secretaría de Educación Pública (SEP) acusaron de “fraude” durante la elección de Delegación favoreciendo al sobrino de Alfredo Palacios; provocando una “Ola de Manifestaciones” que García Roque no pudo contener y que aún se encuentra al “Rojo Vivo” al exigir transparencia y democracia; sin favoritismo ni compadrazgo.
El segundo, correspondiente a un tema financiero; explicó el grupo de profesores adheridos al SNTE 51 que desde la gestión de Gustavo Espinosa Vázquez de la mano con Noé Peñaloza siendo director de la Constructora Santa Julia de Puebla S.A de C.V se hizo el compromiso de compra-venta de casas habitación en diferentes municipios principalmente en Zacatlán; mismo que fue anunciado con “bombos y platillos” toda vez que favorecería al gremio.
Sin embargo, el proyecto no tuvo futuro quedando en una falla de viabilidad ante los hundimientos que presentó el terreno afectando las casas; pero quedó una deuda de 280 millones de pesos; dinero arrastrado por la administración de Cirilo Salas Hernández –mismo que ha permanecido “apartado” ante la denuncia por el cobro de sus dos plazas magisteriales –Federal y Estatal- de tiempo completo durante su periodo como Diputado- salarios que ascienden a más de 30 mil pesos quincenales cada una; y que la Secretaría de la Función Pública del Estado de Puebla tendrá que investigar y sancionar.
Ahora la Constructora de Noé Peñaloza acudió ante autoridades para exigir el primer pago de 50 millones de pesos; lo que provocó la presencia de elementos de la Fiscalía General de Puebla para embargar y cerrar los edificios del SNTE 51; y trasladando la atención administrativa a la Casa de la Mujer ubicada en la colonia El Cerrito; lo que alertó a maestros simpatizantes y contras; adheridos al Movimiento Maestros Por México.
Con el escenario anterior, García Roque dijeron se vio imposibilitado para resolver los diferentes escenarios que se intensificaron con la publicación de mensajes por WhatsApp en redes sociales, donde “giró instrucciones de sacar documentación” principalmente CPU para evitar que información cayera en manos ajenas.
Horas después; narraron los quejosos acudió una Comisión del SNTE Nacional para “frenar el escándalo” que puede fracturar el proceso de cambio de dirigencia sindical, y tratar de mediar con el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, para garantizar la tranquilidad sindical.
Argumentan que el dirigente García Roque “no siente lo duro sino lo tupido”; pues desconoce quiénes son los responsables de la supuesta “Campaña de Desprestigio” sin darse cuenta que tendrá que justificar cada escándalo etiquetado a su nombre; de lo contrario, su delfín tendrá que esperar hasta las próximas elecciones magisteriales; toda vez, que se habla que a través del ex dirigente Cirilo Salas, la ex líder Elba Esther Gordillo a través de su Movimiento Maestros por México intervenga en el proceso electoral para imponer a Dinora García Hernández, concluyeron.