El cáncer de colon es una enfermedad que muestra un crecimiento de 30 por ciento anual en la población mexicana y es el segundo motivo de atención, después del cáncer de mama, en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), informó el doctor Juan Salvador Reyes Salinas, Jefe del Servicio de Oncología y Radioterapia de la Unidad Médica de Alta Especialidad “San José”.
En el marco del Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Colon, el especialista explicó que este padecimiento se origina en el recubrimiento del intestino grueso y en términos médicos se diferencia por el de colon y recto, pero esa clasificación se da sólo por la ubicación del tumor y afecta de igual manera a hombres y mujeres.
Añadió que tan sólo en 2016 se presentaron 330 casos nuevos y cada año se va incrementando de manera rápida; entre el 2015 y 2016 el aumento fue de 30 por ciento.
“En el caso del cáncer de colon, el tratamiento es una cirugía en una temprana etapa, pero si es metastásico, se recurre a las quimioterapias posteriores a la intervención. Hace unos cinco años, el cáncer de colon en etapa cuatro tenía una mortalidad del 100 por ciento en menos de un año, ahora pasan de 24 hasta 36 meses con un tratamiento adecuado”, expuso el especialista.
Asimismo, aseveró que los factores que originan este mal son por el tabaquismo, el consumo excesivo de alcohol, actividad física limitada y una dieta desbalanceada.
Además, dijo que hay un grupo pequeño de personas que lo desarrolla por genética y desde los 20 o 30 años puede presentar molestias, en ese mismo contexto adelantó que los hijos de esos pacientes tienen una probabilidad alta de desarrollar este tumor.
Habló sobre el mito que la fibra previene este padecimiento, pero aseguró que eso no se ha demostrado, al igual que los suplementos, “de hacho hay unos estudios que dicen que los suplementos vitamínicos pueden favorecer la presencia de cualquier tipo de cáncer”.
Recomendó que si se tienen el diagnóstico oportuno, que se presenta con sangrado al evacuar, pero que puede ser confundido con hemorroides, y pasan muchos meses en que el paciente tiene sangrado sin hacerse ningún estudio, porque se le dice que tiene hemorroides y hay veces que sí hay, pero éstas no explican el sangrado, eso hace que cuando llegue al hospital ya esté muy avanzado
Recomendó que a partir de los 45 años la población en general se debe realizar una colonoscopia o si se tienen antecedentes familiares, desde los 20 o 30 años, con una frecuencia de uno cada tres años, de la misma forma hacerse un estudio de sangre oculta en heces.