Puebla, Pue.- El diputado federal Alejandro Armenta Mier, sentenció que recurrirá a los tribunales a defenderse de la suspensión de sus derechos partidistas, por lo que aseguró que solo es el resultado del “amasiato” entre su dirigencia nacional y el ex gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle Rosas.
Acusó que los políticos no pueden quedarse callados ante el abuso en el uso de recursos públicos que contrastan con las migajas presupuestales que se le dan al campo poblano, a los grupos indígenas, a los ayuntamientos y a las más de 12 mil localidades que fueron abandonadas, por un apetito cínico, voraz, abusivo y violador de los derechos humanos.
En la sede de San Lázaro, Armenta Mier, acusó que este amasiato es una relación de complicidad que tiene sujeta a Puebla a intereses mezquinos de estos grupos.
“Se trata de un amasiato privatizador que alteró la Ley a su conveniencia para quitarnos de Puebla, el derecho humano al agua y encarecer su servicio hasta en un 400 por ciento en las tarifas, se trata pues de un amasiato corrupto porque condenó a los poblanos a pagar por más de 50 años faraónicas e inútiles y sobre todo sin impacto social”.
En este sentido, el propio Armenta Mier ejemplificó los casos del Museo del Barroco, cuyo costo ascendió a 7 mil millones de pesos.
Además, sostuvo que esta relación entre el PRI y el PAN en Puebla, llevó a que desapareciera la autonomía en cinco municipios, con el pretexto de crear la Ciudad Modelo, que no beneficia ni a los empresarios ni a los ciudadanos.
Armenta Mier también se dio tiempo de arremeter en contra de César Camacho Quiroz, coordinador de la fracción parlamentaria del PRI en San Lázaro y señaló:
“¿Por qué tanto empeño en promover mi expulsión cuando he servido por más de 32 años al partido?
“¿A caso mis declaraciones incomodan a la cúpula del PRI por sus evidentes nexos con el gobierno panista de Puebla?
“¿Por qué no enjuició así a Cuauhtémoc Gutiérrez, en su momento y optó por defenderlo ante las acusaciones de prostitución y trata de blancas?
”Su omisión sólo reafirma este amasiato, su omisión fortalece ese amasiato”, acusó.
En la sede de San Lázaro, y bajo el argumento de que sólo ha hablado con López Obrador cuando firmó el acuerdo contra la corrupción, el legislador poblano aceptó que ya ha tenido acercamientos con Rocío Nahle García, coordinadora de la fracción parlamentaria de Morena en la Cámara baja.
“Una vez que he sido notificado, y que la razón política y moral me asiste, lo que voy a hacer, es simple y sencillamente, demostrar jurídicamente, en un derecho de audiencia, ganar el caso y reservar mi derecho a mantenerme como diputado independiente, y en su caso, y como la Ley lo permite a los ciudadanos que son electos diputados, mi ingreso a otra fracción”.
Dijo que en su caso, en donde mantiene una militancia partidista por 32 años en el PRI, resulta importante cerrar este capítulo.
“Este capítulo lo cierra la dirigencia nacional del PRI, porque prefieren el amasiato con el ex gobernador Rafael Moreno Valle, prefieren mantener los vínculos con un gobernante que saqueó a Puebla y lo puso como el estado más endeudado del país y en esa lógica, estoy en contra, por eso recibo este castigo por el PRI nacional, es denunciar que el silencio omiso de Enrique Ochoa, es la muestra del amasiato, pero también la prueba de la complicidad”.