- No hay certidumbre en la elección, hubo manipulación de cifras. No coinciden las mismas, afirma el investigador Miguel Reyes
- Se evidenció una tendencia donde subía la votación a favor del candidato de Morena, Miguel Barbosa Huerta, y bajaba la tendencia para la candidata de la coalición del PAN, Martha Erika Alonso.
El investigador de la Universidad Iberoamericana, Miguel Reyes, dio a conocer un estudio donde se documenta una serie de discrepancias e irregularidades en la elección de gobernador de Puebla, las cuales sugieren que la votación debe ser revisada y en su caso repetida.
El académico documentó las discrepancias en el conteo de votos y reveló evidencia de que hubo acción deliberada para violentar la voluntad popular del 1 de julio mediante errores en llenado de actas y manipulación de información oficial asentadas en actas en el conteo final.
Miguel Reyes afirmó que se deberían revisar minuciosamente los resultados de las elecciones o dar por inválido el comicio del 1 de julio y repetir la elección para gobernador en el estado de Puebla.
“Quizá lo que habría que hacer es limpiar completamente la elección, o revisar toda para ver si efectivamente da la vuelta, o las tendencias implican que se acercan más, o definitivamente repetir la elección. Lo que creo que importa es que se respete la voluntad de la gente”, planteó.
Al dar a conocer los resultados de su investigación, se informó que se realizó un análisis exhaustivo del 100 por ciento de las casillas, para buscar los patrones del fraude, y se localizó en un primer momento la manipulación del 73.9 por ciento de casillas, es decir 5 mil 524, dividido en dos formas de operación: en el 28.65 por ciento de las casillas ingresaron votos ilegalmente y en 45.24 por ciento de las casillas sustrajeron votos ilegalmente. Un total de 145 mil 426 votos irregulares.
Además, detalló que el listado nominal del IEEP no concuerda y es inusual, ya que en algunas casillas hubo más de 750 votos registrados, llegando a ser hasta más de mil 300 los votos.
Existe, reiteró, un patrón en las diferencias entre Martha Erika Alonso y Miguel Barbosa Huerta. En donde las casillas con irregularidades “casualmente” gana Erika Alonso.
Al comparar los resultados oficiales se denotó que se concentraron las anomalías en la zona metropolitana de la Ciudad de Puebla, es decir que en los municipios de Puebla, San Pedro Cholula, Tepeaca, San Andrés, Amozoc, Cuautlancingo y Ajalpan se concentró 4 de cada 10 situaciones de manipulación electoral.
Vimos una tendencia, agregó, donde subía la votación del candidato de Morena, Miguel Barbosa Huerta, y bajaba la preferencia para la candidata del PAN, Martha Erika Alonso, y el problema está en que la información oficial al tener dos cifras distintas da lugar a un fraude electoral.
“Encontramos una tendencia muy parecida, al inicio cuando empezamos a ver cifras, de la votación de presidente de la República con presidentes municipales, con legisladores locales y legisladores federales. La única que tenía una tendencia distinta era la de gobernador”, explicó.
El académico subrayó que debieron ser anuladas las actas electorales con variaciones ilegales, pues el listado nominal no permite tener más de 735 boletas y al existir lugares en donde mil 300 personas votaron ya hay incongruencias, por lo que consideró grave que IEEP no se percatara de las anomalías y permitiera las mismas.
Miguel Reyes explicó que la elección para gobernador y Presidente no concuerda, pues apuntó que las irregularidades se reflejan en la diferencia de votos porque hay una desviación de 64 mil votos.
“En algunas casillas te encuentras que votaron para presidente 401 personas y para gobernador mil 398, lo que es inusual, ninguna casilla puede tener más de 750 votos por cuestiones de listado nominal”, recalcó.
Realizó una invitación para que el Tribunal Electoral del Estado de Puebla y el IEEP revisen los resultados del estudio, respaldado por una institución academia de prestigio nacional como lo es la Ibero, para que se esclarezcan los resultados de las elecciones populares.
Hizo responsable de las anomalías al IEEP, ya que no corrigió los resultados y “puso más votos de lo que realmente decían los mismos montos del acta, ¿quién lo hizo?, el Instituto Estatal Electoral, no pudo haberlo hecho nadie más, esto es responsabilidad de las autoridades electorales, no de los funcionarios de casillas ni de los ciudadanos que cuidaron ese día de la elección”.
Miguel Reyes aseveró que la percepción de la elección para gobernador para el imaginario colectivo, recabado por encuestas, revela que para los ciudadanos la elección no es legítima.
Todos los datos utilizados en el estudio son oficiales y están publicados por el IEEP, además de que fueron avalados por notario público para evitar reclamos posteriores a la publicación del estudio.
