- No se había visto este fenómeno, señala el investigador Derzu Ramírez
Puebla, Pue.- El investigador Derzu Ramírez, señaló que en los últimos años México se ha convertido de un país que sólo era expulsor de migrantes a una nación de tránsito y que también recibe migración indocumentada masiva, lo cual es preocupante.
“En los últimos meses se ha observado cómo se han incrementado los flujos de migrantes indocumentados provenientes de Centroamérica, que antes era un flujo de paso hormiga, de grupos pequeños y últimamente estamos viendo las caravanas, compuestas por grandes grupos de personas que pasan por nuestro país de forma indocumentada para intentar llegar a los Estados Unidos”, comentó el académico.
Enfatizó que la diplomacia mexicana ha sido muy activa en conformar el Pacto Mundial de la Migración que se firmó el pasado 10 y 11 de diciembre de 2018 y que se espera que el día 19 de diciembre del presente año se ratifique.
Advirtió que a México le va a costar mucho trabajo cumplir este pacto internacional por la situación por la que atraviesa en su relación con los Estados Unidos. “Hoy en día la migración indocumentada para los Estados Unidos es parte de la agenda central de la relación con México, además de que la migración indocumentada se ha convertido en una bandera política del gobierno del presidente Donald Trump, lo cual comienza a reducir el espacio de México para responder ante este fenómeno, por las presiones que está recibiendo por parte del gobierno norteamericano”.
Dijo que el enfoque de los Estados Unidos hacia el tema de la migración dista mucho de lo que se manifiesta en el Pacto Mundial de la Migración, ya que el enfoque de los norteamericanos es de ley y orden, de tolerancia cero hacia la migración y en ese sentido, los estadounidenses presionan a México para que ejerza políticas públicas bajo este enfoque.
Derzu Ramírez, señaló que también el gobierno norteamericano ha presionado a México para convertirse en el “tercer país seguro. En donde desde el punto de vista jurídico, los Estados Unidos van a comenzar a negar estatus de refugiados a las personas procedentes de Centroamérica, argumento que ya no van a recibirlos porque se encuentran en un tercer país seguro, que sería el caso de México. Y de concretarse esta propuesta, prácticamente le deja el problema al gobierno de México, quien tendría que solventar y gestionar este tipo de peticiones de refugio”.